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Cómo cuidar muebles con tapizado de cuero

Los procesos de curtido y acabado no borran imperfecciones como picaduras de insectos, cicatrices y estrías. Estas sutiles marcas son una prueba de que el cuero es auténtico y natural.

Para disfrutar plenamente de sus asientos de cuero y garantizar su longevidad, siga algunas reglas básicas:

• No coloque sus asientos cerca de una fuente de calor, como un radiador o una chimenea.
• Evite la exposición excesiva al sol, a la humedad y a cambios extremos de temperatura.
• Tenga cuidado con los jeans que pueden transferir color al cuero: esto puede no tener solución.
• No exponga sus asientos a arañazos de mascotas u objetos afilados (por ejemplo, tacos, hebillas).

Limpieza y mantenimiento

Quite el polvo con regularidad, preferiblemente una vez a la semana, especialmente si el mueble tiene un asiento acolchado. Aspire con un cepillo suave o pase un paño suave y seco por la superficie de cuero. Elimine las manchas accidentales lo antes posible, pero nunca con jabones o detergentes fuertes.
El mantenimiento del cuero es importante para preservar su belleza y su aspecto físico. El mantenimiento debe realizarse cuatro veces al año. Respetar esta frecuencia permite mantener un estado de protección constante en el artículo y preservar su eficacia. Deje que el artículo se seque al aire; nunca utilice un secador de pelo ni ninguna otra fuente de calor para secar el cuero.
Para este proceso, utilice una crema de mantenimiento del cuero con propiedades protectoras y nutritivas. Evite los aerosoles con disolventes y cualquier producto a base de aceite o grasa. Vierta una pequeña cantidad de producto en un paño suave y extiéndalo sin frotar para cubrir uniformemente la superficie del cuero. Aplique bien la crema en las zonas de asientos, respaldos y reposabrazos. Deje secar y luego pula con un paño de lana si desea un efecto brillante.